La Iglesia de Dios del Evangelio Completo, tiene el agrado de
presentar el testimonio:
"RESCATADO DEL INFIERNO"
Soy el evangelista Carmelo Brenes. En el año de 1982 tuve un accidente en el cual
hubo un desenlace mortal, mi vida fué arrebatada en aquél momento, todo terminó
sobre la tierra. Para mí, ese día había termiando todo mi existir. En aquél
mismo instante sentí que todo se oscurecía y comencé a caminar por un túnel oscuro,
con un ser etereo que me llevaba.
Comencé a oír lamentos y a ver cosas espantosas en ese lugar. Pude comprender que mi vida había sido arrebatada, desde ese momento comprendí que mi vida ya no era más en la tierra.
Pero lo más tremendo era que conforme ibamos avanzando por aquél túnel, el temor iba creciendo más y más en mí vida. Podía saber que estaba vivo en alguna parte aunque mi cuerpo había fallecido.
Caminamos por un tiempo en aquél tunel. De pronto comencé a oir quejidos y lamentos,
los cuales nunca había escuchado jamás; seguimos avanzando en ese túnel frío y oscuro
y comencé a ver abajo grandes serpientes gigantescas, que se movían de un lado
a otro, también a oír distintos quejidos y distintos lamentos. En aquel lugar casi todas las personas tenían en comun mucha sed y todas pedian agua, los que estaban en ese lugar pensaban en el agua en todo momento.
Seguimos avanzando hasta que llegamos a un lugar más amplio, a una planicie ,
donde había muchos aposentos o divisiones y muchas personas en esos
distintos lugares. Comencé a gritar con terror y a pedir misericordia a Dios, comencé a
decirle: "Señor acuérdate Dios de mi vida!, Señor ten misericordia!". En aquél momento
sentía un terror espantoso que invadía mi alma, yo sentía que mi vida estaba pasando toda nuevamente por enfrente de mícomo una película.
Asímismo ese ser que me llevaba a la puerta seguía avanzando mientras yo gritaba: "!Señor ten misericordia de mi!,!Señor ten misericordia de mi!, te ruego que me ayudes!, ayudame Señor!".
Pero pronto se hizo un silencio y escuché una voz que dijo: "Deténte!". Y tembló hasta el
mismo infierno en ése momento. Aquél ser que me llevaba me soltó, pero no caí a
tierra tampoco, sino que quedé en una parte como levitando. Y oí la voz de aquél ser
que dijo: "Yo no soy Dios de adulteros, Yo no soy Dios de fornicarios, Yo no soy un
Dios de mentirosos, por que me llamas Señor? si Yo no soy un Dios de vanagloriosos".
Yo sentí por un momento que mi vida iba a ser destruída, pero conforme pasaban los
momentos, la voz de aquél ser comenzó a suavizarse y luego me habló diciéndo: "Vén
y te mostraré lo que hay en éste lugar , lo que espera a aquéllos que no han querido
seguir mis caminos y que han ido en pos de sí mismos". Comencé a caminar por aquél
lugar y a escuchar esos lamentos que partían hasta mi alma. De pronto nos
detuvimos frente a una celda, donde estaba una mujer sentada en una mecedora, pero
parecía que no le estaba sucediendo nada. De pronto tuvo una transformación, ella era
una bruja y entre lamentos y quejidos pedia auxilio porque todo su ser ardía en
llamas, comenzó a dar gritos pidiendo que alguien le auxiliara.
En ese momento el Señor me habló y me dijo: "La paga del pecado es muerte y el que entra en este lugar nunca mas saldrá de el". También me mostró lugares abajo del suelo, abiertos como
con aceite hirviendo o algo similar, donde había seres humanos que ardían en llamas y conforme ellos querían salir venía un demonio nuevamente y los metía allí mismo a ese lugar.
Me mostraba el Señor como a causa de la desobediencia del hombre muchos seres que habían estado una vez en la iglesia cristiana evangélica, estaban en aquél lugar también, lamentando por su vida. Lamentando y pidiendo misericorida que ya no puede ser hallada en ese lugar, porque
la misericordia el hombre la alcanza cuando está en ésta tierra, una vez que el hombre
muere no puede alcanzar misericordia,.
Dice el Señor que: "Está establecido para todos los hombres que mueran una sola vez y después de esto el juicio". ("Y de la manera que está establecido para los hombres que mueran una sola vez, y después de esto el juicio". Hebreos 9:27)
Seguimos avanzando y llegamos a un lugar muy especial, donde había gente que
había escuchado la palabra de Dios pero que no había querido arrepentírse. Me llamó
mucho la atención una mujer con dos niños, los cuales le recordaban a esa madre y le
decían: "Por que no nos llevaste a la escuela dominical??, por que no nos permitiste ir
a la iglesia??". Y la maldecían. Ellos una vez habían querido ir a oir palabra de
Dios pero su madre no queria dejarlos escuchar el Evangelio del Señor.
También me pasó donde había pastores, evangelistas , misioneros y muchos creyentes, cada
uno estaba ahí por distintas causas y por distintos motivos. Allí había un pastor que me
llamó la atención en especial, pues este hombre nunca había creído en el poder del
Espíritu Santo, no creyó en el poder de hablar en lenguas, no creyó en el bautismo con el Espíritu
Santo, no creyó en las sanidades del Señor, pero ahora el pedía misericordia. El rogaba
a Dios que tuviera misericordia y que le dé una oportunidad para salir y decir que sí
exíste el poder de hablar en lenguas, que sí existe el Espíritu Santo y que sí hay libertad en el
evangelio del Señor. Pero ya no puede salir de ese lugar, pues mucho tiempo tuvo aquí en
la tierra para arrepentirse de sus maldades, aún estando en la iglesia cristiana
evangélica, siendo un pastor y no había alcanzado misericordia.
También había un misionero, estaba allí porque pidió dinero para abrir una obra en Africa pero sólo dió la mitad de aquél dinero, el resto lo tomó para sí, y ahora en ese lugar él pide
misericordia y una oportunidad también para devolver el dinero que no era suyo.
Ahí recuerda de que forma el mintió para tomar aquél dinero que no éra de él y pide
perdón y pide misericordia pero al ver que no puede ser concedida, maldice a
Jesucristo.
Yo quiero decirte mi estimado, no es igual cuando estas en vida aquí, a estar en ese
lugar, mucha gente aquí difiere con el Evangelio de Jesucristo, pero allí se escuchan
los lamentos, se escucha el lloro, se escuchan los gemidos de dolor y de terror en la
garganta de aquéllos que una vez estuvieron en una iglesia alabando el Nombre de
Jesús y ahora ahí lamentan y piden misericordia por sus pecados.
Pero un día en esta tierra tuvieron esa oportunidad ahora en ese lugar sólo les espera el castigo eterno por los siglos de los siglos. Allí hay también pastores que se robaron los diezmos de la
iglesia, se robaron los diezmos del Señor y en ese lugar hoy quieren una oportunidad
para devolver aquél dinero, quieren una oportunidad que ya no puede ser hallada
estimado hermano y amigo, una oportunidad que sólo en esta tierra la tiene el ser
humano.
Ellos pasan día y noche eternamente buscando esa oportunidad para deshacer
todo lo malo que hicieron, pero yo quiero decirte, la oportunidad hermano y amigo es cuando estás vivo, es cuando estás en esta vida, porque después de esta vida ya no
hay otra oportunidad. El que muere sin Cristo vá para el infierno y el que muere con
Cristo vá para la vida eterna. Mucha gente creé que morir es solamente que este
cuerpo caiga a tierra y ahí termina todo, pero cuando mueres es cuando realmente empiezas a
vivir, es cuando realmente la verdadera personalidad del creyente o del pecador
comienza a vivir; sea para vivir en la gloria de Dios eternamente o sea para vivir en la
condenación y verguenza eterna.
Eso puedes escogerlo hoy, en este momento, ahí donde estas puedes meditar y pensar a dónde quieres tú ir, en dónde quieres pasar tú eternidad, en dónde quieres pasar el resto de tu vida después de que mueras, en el infierno o en la gloria, en esta hora puedes decidir , porque sólo hay
una oportunidad en la vida.
Seguimos avanzando y llegamos a un lugar tan espantoso, donde había
demonios de todo tipo, había unos que tenían un solo ojo y un brazo y una
pierna, al final de ella como un casco de una bestia mulada, la cara como la mitad de
cara de un hombre pero el resto no aparecía, pregunté a Dios y le dije: "Señor y esto que
es?". Y el dijo: "Esto es demonio de destrucción en los hogares, en la vida de aquellos
que andan perdidos, este es el demonio que destruirá y destruirá incanzablemente día
tras día".
Yo quiero decirles que el tormento en aquél lugar es terrible, tan terrible que el hombre no puede dejar de recordar todo lo que hizo en esta tierra. Es como dice Lucas capitulo 16, versículo 18 en adelante: Que aquel hombre rico murió y fue sepultado y en el hades estando en tormento alzó sus ojos y vió a Abraham y a Lázaro en su seno, ahí el podía recordar que tenía 5 hermanos, podía pensar en ellos
en ese momento. Tu alma allí esta viva, tu alma siente el dolor, ahí puedes
recordar todo lo que has pasado en esta vida sea bueno o sea malo, ahí puedes
recordar todas las cosas que has vivido dentro de la iglesia o fuera de ella, ahí
puedes recordar a tus familiares, tu madre, tus hermanos, tus amigos y eso es parte del
tormento.
Ese hombre allí recordaba que tenía 5 hermanos y suplicaba también por
misericordia diciendo: Padre Abraham envía a uno para que les hable a fin de que ellos
se arrepientan y no vengan jamás a este lugar de tormento. Pero Abraham le
dijo: "A Moisés y a los profetas ". ("Había un hombre rico,
que se vestía de púrpura y de lino fino y hacía cada día banquete con esplendidez.
Había también un mendigo llamado Lázaro, que estaba echado a la puerta de aquel,
lleno de llagas y ansiaba saciarse de las migajas que caían de la mesa del rico y
los perros venían y le lamían las llagas. Aconteció que murió el mendigo y fue llevado
por los ángeles al seno de Abraham. Murió también el rico y fue sepultado. En el
Hades alzó sus ojos, estando en tormentos y vio de lejos a Abraham y a Lázaro en su
seno. Entonces, gritando, dijo: "Padre Abraham, ten misericordia de mí y envía a
Lázaro para que moje la punta de su dedo en agua y refresque mi lengua, porque estoy
atormentado en esta llama". Pero Abraham le dijo: "Hijo, acuérdate de que recibiste
tus bienes en tu vida, y Lázaro recibió males. Ahora este es consolado aquí y tú
atormentado. Además de todo esto, una gran cima está puesta entre nosotros y
vosotros, de manera que los que quieran pasar de aquí a vosotros no pueden, ni de
allá pasar acá".
Entonces le dijo: "Te ruego, pues, Padre, que lo envíes a la casa de mi
padre, porque tengo cinco hermanos, para que les testifique a fin de que no vengan ellos también a este lugar de tormento". Abraham le dijo: "A Moisés y a los Profetas
que los oigan a ellos!" Él entonces dijo: "No, padre Abraham; pero si alguno de
los muertos va a ellos, se arrepentirán". Pero Abraham le dijo: "Si no oyen a Moisés y a
los Profetas, tampoco se persuadirán aunque alguno se levante de los muertos" Lucas
16:19-31.) Así amado hermano y amigo que lees este testimonio, hoy tienes profetas
de Dios que predican su evangelio sobre esta tierra.
Has escuchado la palabra de Dios y es ahora cuando tienes que arrepentirte, nadie de los muertos vendrá para salvarte, porque el que te salva es Jesús de Nazaret y ya resucitó de entre los muertos
y está sentado a la diestra del Padre para salvarte. Nadie más puede salvarte, dice el
libro de los Hechos 4:12 "Porque en ningún otro hay salvación, porque no hay otro
Nombre debajo de los cielos dado a los hombres en el cual podamos ser salvos, sólo
en Jesucristo".
Al ver todo aquél dolor, todavía siento terror y dolor en mi alma, de ver que hay
niños pequeños en ese lugar, entre la edad de los 12 y los 14 años que
también lamentan muchas cosas que hicieron aquí. Hay muchos que creén que sus
hijos no se van a perder porque están pequeños pero déjeme decirle, tus hijos, si no
están en los caminos del Señor y no pueden distinguir entre lo santo y lo profáno también
irán a ese lugar, porque es como dice Apocalipsis 20:11 "Vi los muertos grandes y
pequeños de pie ante Dios". Toda persona que pueda entender y comprender
qué es la maldad, tendrá que presentarse delante de Dios, nada se le escapa al
Señor.
Seguimos caminando hasta que llegamos a una parte donde había como un estadio de
futbol, pero allí el hazme reír de los demonios eran los seres humanos, allí la burla de
ellos era la imagen del Dios viviente, ahí el gozo de ellos era
atormentar la viva imagen de Dios, pues les quitaban piezas de sus cuerpos y las
escondían para verlos buscándolas y eso era un gozo para ellos porque eso es
tormento y dolor que es lo que le agrada a satanás y a sus demonios.
Como dice San Juan 10:10 "el enemigo no vino sino para robar,destruír y matar, yo he venido para que
tengan vida y para que la tengan en abundancia". No es igual que cuando te sientas
aquí en una silla y puedes pedir agua y tomas, en ese lugar la gente pide agua y pide
misericordia, en ese lugar la gente lamenta hasta el día en que nació. En ese lugar
muchos lamentan no haber conocido a Jesús, y algunos que lo conocieron también
lamentan el haberse apartado de Él.
Pero ya es tarde porque el arrepentimiento para el hombre es en esta tierra, es aquí en este lugar mientras que estás vivo, donde puedes pedir y decirle: "Jesús ten misericordia de mí, pues he pecado!".
Yo quiero decirte que si te has descarriado del camino del Señor, si te has apartado,
hoy es tiempo para que te vuelvas al Señor!, no te averguences de lo que diga tu amigo,
no pienses lo que te diga tu padre, tu novia o tus hermanos, piénsa lo que dice el Señor , piensa
en su Palabra.
Que el que se averguenza de Él en esta tierra, Él se avergonzará de
esa persona allá en el cielo (Porque el que se avergonzare de mí y de mis palabras,
de éste se avergonzará el Hijo del Hombre cuando venga en su gloria, y en la del
Padre, y de los santos ángeles.Lucas 9:26), es tiempo de que corras a la presencia
de Dios, es tiempo de que corras a buscar la salvación, no busques una iglesia busca a
Jesucristo!, no busques donde te agrade, busca donde se mueva el Espíritu Santo de
Dios y arrepiéntete de tus pecados. Es tiempo de arrepentimiento, es tiempo donde puedes comenzar a clamarle a Dios y decirle : "Señor, yo reconozco que todavía no soy salvo, Señor yo reconozco que mi salvación todavía no la he logrado conseguir".
Si ésta es tu situación al leer este testimono, corre a Jesucristo, pues tu vida esta en peligro,
la Palabra del Señor dice que el viene como ladrón en la noche. Tu estás preparádo para
alcanzar la salvación?, estás listo? o apenas te vas a preparar?.
Continuamos mirándo lo que hacían aquellos seres allí, le sacaban un ojo y lo escondían, para ver como aquél ser humano se arrastrába buscando lo que le faltaba, porque todo dolor se siente en ese lugar hermano y para ellos eso era el gozo, ver aquella persona sufrir. Algunos le quitaban alguna parte de alguna pierna para verlo brincando y cojeando buscando lo que le faltaba, a otro le quitaban un
brazo para reírse de ver el dolor de la persona.
Yo quiero decirte que para aquél que conoce a Jesús, para aquél que ha caminado
en los caminos del Señor y muere apartado de Él es doble castigo como dice la
Palabra. Aquel que sabiendo hacer lo bueno y hace lo malo recibe doble
condenación ("Y el que sabe hacer lo bueno, y no lo hace, le es pecado" Santiago 4:17),
pues ahí el castigo para la persona que ha creído en Dios en alguna vez, es más duro
aún todavía que para aquél que no ha conocido a Jesucristo. Con esto no quiero
decirle que el que no ha conocido a Jesucristo lleva una vida de paz en ese lugar, lleva una vida de
tormento y dolor también pero es más tolerable que para aquél que ha conocido a
Jesús, aunque usted no lo crea.
En mi alma había terror, yo sentía un pánico profundo, como el que siento en este momento, sentía terror de mi vida, por todos los horrores que estaba mirando, sentía dolor y compasión por aquellas
almas pidiéndo misericordia. Sentía que todo mi ser se debilitaba, pero ahí estaba el
Señor fortaleciendome y me dijo: "Te mostraré cuántas cosas todavía esperan al
hombre".
Sabes?, pasamos de ese lugar, a una celda distinta que sólo ardía por los alrededores
pero había almas allí, llorando y sufriendo y comencé a ver qué era lo que sucedía con
ellos. Aquellos que estaban allí en ese castigo con llamas que parecían como gases,
esos eran aquellos que una vez se habían parado en el altar de Dios a presidir cultos a
predicar el Evangelio de Jesús.
Esos eran parte de aquellos que en una oportunidad habían echado fuera demonios y habían hablado lenguas en esta tierra, más ahora estaban en ese tormento, porque un día
tomaron la decisión de apartarse del camino santo de Dios.
Estuvimos viendo, como aquellos personajes ardían en llamas y comenzaba el lamento, el dolor y aunque casi eran huesos de un color gris oscuro, sentían el dolor, podían hablar también,
podían pedir misericordia. Cuando ellos sentían que el Señor estaba pasando por allí,
gritaban a grandes voces con lamento: "Jesús!, ten misericordia de nosotros!". Pero
el tiempo de la misericordia es ahora.
Seguimos avanzando hasta que llegamos a un lugar y Dios me dijo: "Mira esta calle
ancha". Me quedé viendo aquella calle, multitud de creyentes con la Biblia en la mano,
levantada al aire. Algunos iban orando y otros gritándo , ellos continuaban caminando directo al infierno, y le pregunté:
"Dios, por qué es esta situación con el hombre?" y me dijo: "Viven dos vidas, ellos están viviendo dos vidas, una en mi casa de oración y otra en su misma casa". Y comencé a
decirle: "Señor, pero esta gente viene de alabarte!". Y me dijo: "Sí y aunque griten y
digan cosas bonitas para mí, su corazón está llendo de adulterio, lleno de maldad, de
mentira, de engaño, de odio, de raíz de amargura, de malos pensamientos".
Entonces pude comprender lo que dice la Escritura : "No todo el que me dice Señor, Señor
entrará en el Reino de los Cielos"(No todo el que me dice: "¡Señor, Señor!", entrará en
el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos.
Muchos me dirán aquel día: "Señor, Señor, ¿no profetizamos en tu nombre, y en tu
nombre echamos fuera demonios y en tu nombre hicimos muchos milagros?" Entonces
les declararé: "Nunca os conocí. ¡Apartaos de mí, hacedores de maldad!" Lucas
13:21-23).
Sabes ?, hay veces que nosotros creémos, que estamos camnando bien y que
estamos haciendo las cosas bien para el Señor, pero resulta que tal vez hay un
hermano el cual no nos agrada, el cual no nos cae muy bien y entonces por eso
no venimos a la iglesia y cuando el siervo del Señor pregunta que cuántos
aman a Dios? ellos dicen: "Amen!". Pero la Biblia dice que el que no ama a su hermano
es un homicida y ningún homicida entra en el Reino de los Cielos. Ésta es una de las
cosas principales que suceden en la iglesia del Señor, muchos entre ellos mismos se caen
mal, se odian, pero están esperando a Cristo, pero la paga del pecado es muerte dice
Romanos 6:23 (“Porque la paga del pecado es muerte, mas la dádiva de Dios es vida
eterna en Cristo Jesús Señor nuestro”.)
Muchas personas aquél día lamentarán: "-Vas a ir a la iglesia? - No, no voy por que viene el hermano fulano a predicar y yo no soporto escucharlo". Pero en aquél lugar clamarás para que venga ese hombre a predicar para escuchar su palabra allí, pedirás una oportunidad para aquél que has
aborrecido en esta tierra y querrás escuchárlo. En ese lugar lamentarás no haber escuchado la palabra del Señor que dice: "Ama a tu prójimo como a tí mismo" ("No te vengarás ni guardarás
rencor a los hijos de tu pueblo, sino amarás a tu prójimo como a ti mismo. Yo, Jehová"
Levítico 19:18).
En ese lugar lamentarás todo tiempo que has perdido en la iglesia del Señor, allí será el lloro y el crujir de dientes como dice la palabra.
Sabes que es triste? que vivas una vida cristiana evangélica en este lugar y que cuando
mueras, no vayas para el cielo, que cuando mueras tu vida no vaya a la salvación. Yo
pienso que hoy debes meditar, yo pienso que hoy debes de ponerte a
pensar: Estoy haciendo la voluntad de Dios?, será que si Cristo viene hoy yo me voy con Él?.
Quiero decirte por este llamado, medita hoy, quieres entrar al cielo?, medita hoy: La
vida cristiana que estoy llevando, le agradará a Dios?.
Es tiempo para que reconozcas tu falta y te vuelvas al Señor. Tu amigo que lees este
testimonio, hoy es un dia para que busques al Señor, hoy es un día para que te vuelvas
a Cristo, hoy es un día que puedes aceptar a Jesús como tu Salvador y escapar de los
lazos del infierno. Sabes que algunas personas dicen: "Bueno, no importa a dónde
voy, no importa lo que suceda, yo voy a disfrutar de esta vida!". Pero yo quiero decirte
que disfrutar de esta vida es vivir con Cristo Jesús, el disfrutar de esta vida es andar en
los atrios del Señor!. Disfrutar de esta vida no es en la cantina, no es en el licor,
no es con las mujeres, es en los atrios de Dios, pero no como todos aquellos que
vienen a los atrios del Señor por unos momentos, es buscar a Dios en espíritu y en
verdad, suplicándole misericordia al Señor por aquellos que todavía andan en el pecado y la muerte.
Seguimos avanzando por aquél lugar, vi algo tan sorprendente que me dejó atónito, allí también había gente que yo creía que era muy santa en la tierrar, allí estaban también en el infierno, suplicando
por una oportunidad de misericordia. Estaban diciéndole al Señor: "Señor, ten
misericordia de mí!". Aunque yo también era uno de esos, que suplicaba al Señor que
tuviera misericordia de mí. En ese momento mi alma se partía, sentía un dolor
inmenso por aquellas almas, sentía que había muchas razones para seguir viviendo, sentía
que el hombre necesita una oportunidad con Jesús. Me dolía tanto cuando comencé a
ver como las personas en ese lugar se arrastran, se arrastran pidiéndo misericordia y
pidiendo perdón.
Llegamos donde había una mujer, que hacía la semejanza de la palabra del Señor, y
predicaba sobre San Juan 3:16. Y ella decía : "Porque de tal manera amó Dios al
mundo, que ha dado a su Hijo unigéntito para que todo aquél que en Él creé, no se
pierda, mas tenga vida eterna". Pero llegó en momento donde pregunté al Señor: "Por
qué ella está aquí!, si puede recordar sobre que predicaba Señor y daba el mensaje de
tu evangelio, por que está en este lugar?". Y Él me dijo: "Por que nunca pudo perdonar
a su esposo, por que nunca pudo perdonar a su marido". Y me pregunté: "Señor, tan
fácil es perder la salvación?, tan fácil es Señor, perder la salvación Padre?".
Aquella mujer había pastoreado una iglesia evangélica 35 años y en aquél momento
estaba pasando toda su vida frente a ella perdída, pues nunca pudo perdonar, ahora
ella suplíca allí, una oportunidad solamente para perdonar a su marido.
Pero yo quiero decirte, si tienes problemas con tu marido o con tu esposa el perdón es hoy, ahora es
que tienes que llamarlo y decirle: "Perdóname", "Te perdono, por lo que me has hecho".
Pónte de acuerdo, porque si Cristo te llamara en este momento, hacia dónde irías?
("Ponte de acuerdo con tu adversario pronto, entre tanto que está en el camino, no sea
que el adversario te entregue al juez, y el juez al alguacil y seas echado en la cárcel.
De cierto te digo que no saldrás de allí, hasta que pagues el último cuadrante" Mateo.
5:25-26). La palabra de Dios dice: "Bienaventurados los misericordiosos, por que ellos
alcanzarán misericordia, bienaventurados los que lloran, porque ellos recibirán
consolación" (Mateo 5:7). Si tú eres de aquéllos que oran en la presencia de Dios, que
gime en la presencia del Espíritu Santo, todavía estás en la gracia y en la misericordia del Señor, pero si ya no puedes llorar en la presencia de Dios, si ya no puedes orar, si has abandonado tu vida de oración, déjame decirte que estás corriendo grave peligro.
Sabes algo hermano? El perdón es algo especial y aquella mujer no había podido perdonar. Ella había pastoreado durante 35 años una iglesia, escuchame bien amado hermano y en sólo un segundo que es la vida del ser humano, habia perdido todo. Medita hoy, piensa y reacciona, de como estás viviendo tu vida.
Y tu amigo, que no conoces a Jesús, como quieres pasar la eternidad?.
Sabes?, tengo un hermano biológico, que él dice: "El día que yo muera, que me váya
para el infierno, allí que me atizen con carboncillo y le ayudaré a los demonios a tizar
ese fuego". Pero déjeme decirle, el juicio de Dios le ha alcanzado, a la hora de este
testimonio , él esta con SIDA y está suplicándo una oportunidad a Dios. Se
convirtió al Señor porque ya no piensa igual, ya no quiere ir a ese lugar, ya no creé que es tan fácil abrir la boca y decir que lo atizen con carboncillo o a estar a punto de entrar en las puertas del infierno.
No es igual decir "quiero ser", a ser realmente atormentado en aquél lugar.
Este hombre eso decía y quiero decirte que hoy por misericordia de Dios, él ha aceptado a Jesús como el Salvador de su vida y quiero decirte también esto, escuchame bien: El tuvo esa oportunidad pues esa enfermedad iba progresando en su vida, pero tú, como vas a morir o en que momento tendrás la oportunidad? aparte de este momento para decirle al Señor que te perdone, o morirás
instantáneamente sin siquiera pedirle perdón a Dios? medita en este momento, medita
en este momento, cuánto tiempo es tu vida??
Seguimos avanzando, llegamos hasta una cima, donde había un grupo de hombres que
supuestamente eran "cristianos evangelicos". Pero en el barrio donde
vivían había un hombre que había sido alcohólico y se había convertido a
Jesucristo. Un día su esposa enfermó y fué tocando puerta a puerta donde aquellos
hermanos y le dijo: "Mire, mi esposa enfermó, necesito que me presten un dinero para
llevarla al hospital". Y aquellos hombres le dijeron: "!No, no tenemos dinero!".
Y fué a donde otro y también le dijo: "No tengo dinero". Sucesivamente caminó casa
por casa donde aquellos hermanos, pidiéndo el pasaje únicamente hermanos, para
llevar a su esposa al hospital, pero ningun de ellos le cedió el pasaje, ninguno de ellos
le concedieron siquiera los medios para llevarla al hospital y ella murió.
Y ahora en ese lugar ellos están allí y se llaman hermanos uno al otro y dicen: "Viste hermano que
lección le dimos a ese alcohólico, quería el dinero para irse a las cantinas a tomar licor,
pero a mí no me iba a agarrar con eso, yo sé que lo que quería era tomar licor, pero yo no le dí ni un peso, fué a donde el otro y tampoco y así sucesivamente.
Ellos hacen el comentario en ese lugar, lo más triste es cuando uno de ellos comienza
a arder en llamas y comienza a dar gritos espantosos de dolor y comienza a
lamentarse por todo lo malo que hizo en esta tierra, comienza a decir: "Señor, por qué mi
corazón en ese momento no se arrepintió? porque no pudo ver lo que estaba haciendo en mi vida? La Biblia dice claramente que los verdaderos hijos de Dios, son lo que son guiádos por el
Espiritu de Dios, según Romanos 8:14 (Todos los que son guiados por el Espíritu de
Dios, son hijos de Dios).
Cuando esto sucedía hermano, todos comenzaron a arder en llamas y comenzaron a lamentar y a recordar aquél día , en que aquél hombre había tocado sus puertas , comenzaban a recordar aquél momento cuando les había solicitado un favor.
Yo no sé si hoy no te arrepiéntes y cuando estés en aquél lugar recuerdes también que un día escuchaste este testimonio, de que un día se te habló de que tenías que presentárte ante Dios, de que no pagaras mal por mal y de que un día habías escuchado el Evangelio de Jesús y no te
quisiste arrepentir. Sabes? ese día será lamentable para tu vida, ese día será
lamentable!.
Allá los hombres ardían en llamas y estaban atados con una cuerda , sus cuerpos de color gris oscuros ya no podían nada más que lamentar y dar gritos de dolor y de espanto porque el dolor era insoportable, su carne casi derretida caía de su cuerpo, su piel iba cayéndo hasta que quedaba el puro hueso de un color gris oscuro también. Quiero decirles, que este tormento es permanente, este tormento esalgo que no termina jamás y aquellos hombres allí recuerdan, cuanta maldad tenían en
su corazón.
Escucha bien, esto no es una película, no es una historia inventada, esto
es algo que ocurrió. Esto es algo que pasó en mi vida y yo hoy quiero decirles que yo era un cristiano evangélico, convertido a Jesús, oraba por los enfermos y Dios
los sanába, oraba por los paralíticos y Dios los levantaba, echaba fuera demonios y
hablaba nuevas lenguas como hasta hoy, pero en mi vida, había entrado un espíritu de
vanagloria que yo hasta miraba a mi pastor espiritualmente hablando muy pequeño.
En ocasiones llegaban a que orara por sanidad y como no ocurría la sanidad, al otro día
venían para que yo orara y yo llegaba solamente y daba la palabra y Dios respaldaba la
palabra que decía. Yo creí que era yo el que estaba haciendo
la obra del Señor, en mi vanagloria yo creía que yo era alguien superior, según mi entender
un hombre superdotado de algo especial y no podía comprender que era la
misericordia de Dios que estaba en mi vida.
Hasta que estuve en ese lugar y Dios me hablo y me dijo: "Yo no soy Dios de vanagloriosos". Entonces pude comprender cuántos nos parábamos en un altar llenos de orgullo y de vanagloria, porque
Dios les permite cantar alabanzas en su nombre, se vuelven egocéntricos. Muchos
que predican la palabra y Dios les usa, creén que ellos son algo sobrenatural , cuántos que Dios ha
puesto el don de liberación en sus manos se enorgullécen y piensan que ellos son
alguien superior?
Por eso yo quiero decirte, que Dios está viendo cada uno de tus pasos, Dios está
viendo cada uno de tus movimientos, Dios te está escuchando y conoce tu corazón. Y
yo quiero decirte, tú que lees este testimonio, si en tu corazón hay vanagloria, si en tu
vida hay altivéz, si miras con menosprecio a tu hermano, a tu pastor, arrepiéntete de
tus pecados en esta hora.
Es mejor humillarte acá delante de los hombres que ser humillado en la presencia de Dios. Yo quisiera, que un día, pudieras siquiera ver por un segundo este lugar, o siquiera escuchar por un
segundo los lamentos, los quejidos, los lloros, aquellos lamentos tan espantosos que
llenan el alma de terror, aquellos lamentos que llegan hasta lo mas profundo del
corazón, aquel grito de lamento que dice: "!Señor!, ten misericordia de mí!, Señor
sácame de este lugar, Señor! , extiénde tu mano y sácame de este lugar de tormento!".
Seguimos caminando y llegamos a una parte, como una antesala si se puede llamar así y
salió un ser que gritó y todos los demonios se presentaron en ese momento delante de él.
Se presentaron dos mujeres muy hermosas, las cuales tiene por labor sobre la
tierra destruir los ministerios, levantárse en contra de pastores o ministros, en
ocasiones ustedes verán que mujeres muy lindas, jóvenes, se acercan a un ministro de
Dios para hacerlo caer en pecado. Esa es la meta que el diablo les ha encomendado a
esos demonios, esa es la meta tu que sirves, que precedes en la iglesia, tu que cantas
en el coro de alabanza, tú que tocas la guitarra, tú que tocas la batería y el órgano,
escúchame bien: Satanás quiere destruir tu vida!, y entiende bien esto , si tiene que
usar a tu padre , a tu madre, a tu hermano, a tu pastor, a tu hermano de la iglesia, lo
usará, porque todo aquél que no tenga su corazón arrepentido delante de Jesús puede
ser un instrumento de satanás en cualquier momento.
Estas mujeres salen por toda la tierra, pero no van a las cantinas ni a los bares, van exacta y
directamente a las iglesias, de igual manera asi hay hombres, demonios vestidos de
hombres, que salen a las iglesias, para confundir a las jóvenes y aún las señoras
casadas, porque haciendo esto destruyen muchas vidas, pero son enviados de satanás con espíritus de demonios, para destruir la obra del Señor.
En ese lugar también había un hombre que blasfemó en contra del Espiritu de Dios y
ese hombre está parado allí pidiéndo perdón y misericordia. Yo quiero decirte que a
cada instánte le salen gusanos de fuego de su boca , de sus ojos y de sus oídos y él los
quita con su mano, pero entre más los quita más salen, entre más se mueven mas
gusanos de fuego corren por su cuerpo.
Como dice Marcos 9:44, este hombre pega grandes gemidos de dolor, da grandes alaridos, pero no puede salir de ese lugar, ni puede destruír a los gusanos que lo están atacando, no puede quitarlos de su cuerpo, pues entre más los quita más salen sobre él. T odo el tiempo lo pasa en ese tormento, todo
el tiempo pasa en ese dolor y entre más gusanos el quita de su cuerpo, más salen!,
Llega un momento en que esos gusanos comen hasta sus huesos, el dolor es
insoportable, por la intensidad de sus gritos, uno siente un pavor siente un terror inmenso al
ver todos los castigos y terrores que hay en ese lugar,
En ese momento recuérdas a toda tu familia, ahi te puedes acordar de cuánta familia tienes, quienes
están en el Señor y quién no. Y yo te quiero decir, tienes que tomar la promesa de Dios
que dice: "Creé en el Señor Jesucristo y serás salvo tú y tu casa" (Hechos 16:31).
Sabes?, si ustedes aman a su familia, comiéncele a predicar del Evangelio del Señor para
que ellos escápen del infierno!.
Mateo 10:28 dice: "No temáis a los que matan el cuerpo, más el alma no pueden matar, más bien temed a Aquél que puede destruir vuestro cuerpo y vuestra alma en el infierno".
Hay veces que nos escondemos del pastor, hay veces nos escondemos del
diácono de la iglesia, hay veces que nos escondémos de los ancianos de la iglesia,
pero de la presencia de Dios, nadie se puede esconder, siempre, acuérdate que dónde
te encuentres, en lo alto, en lo profundo, siempre estarás en la presencia de Dios.
Hay algo por lo cual hay muchisimos cristianos en ese lugar y aunque le
parezca increíble es por la mentira, algunos llegan a la iglesia y dicen: "por que no vino
usted ayer?" Y el otro contesta: "Sabe es que tenía tantas cosas que hacer, que no
pude". Pero no es así, es simplemente que no quería ir, pero mintió, y sabes?,
exactamente eso fué lo que hizo Ananías y lo que hizo Safira, en el libro de los Hechos
capítulo 5 versículo 3. "Y Pedro le dijo: Ananías, porque llenó satanás tu corazón para
que mintiéses al Señor, porque no has mentido a los hombres sino a Dios". Y aquél
hombre cayó muerto y después cuando llegó su mujer el también le preguntó: "Safira,
vendisteis en tanto la heredad?, y ella dijo: Si, en tanto. Y él dijo, he aquí a la puerta los
pies de los que sacaron a tu marido y te sacarán a ti también". Y al momento aquella mujer expiró y murió a causa de la mentira.
Hay muchos cristianos evangelicos que están en ese lugar, porque creén que mentir simplemente al pastor es todo, pero sepa bien amado usted que me escucha, que cuando usted miente, no le miente al hombre, le miente a Dios, la mentira está presente delante de Dios.
La la palabra de Dios dice que ningún adultero, ningún fornicario, ningún borracho, ningún mentiroso entrará en el Reino de los Cielos. (Pedro le dijo:Ananías, ¿por qué llenó Satanás tu corazón para
que mintieras al Espíritu Santo y sustrajeras del producto de la venta de la heredad?
Reteniéndola, ¿no te quedaba a ti?, y vendida, ¿no estaba en tu poder? ¿Por qué
pusiste esto en tu corazón? No has mentido a los hombres, sino a Dios. Al oir Ananías
estas palabras, cayó y expiró. Y sobrevino un gran temor sobre todos los que lo oyeron. Entonces se levantaron los jóvenes, lo envolvieron, lo sacaron y lo sepultaro. Pasado
un lapso como de tres horas, sucedió que entró su mujer, sin saber lo que había
acontecido. Entonces Pedro le dijo:-Dime, ¿vendisteis en tanto la heredad? Y ella
dijo:Sí, en tanto. Pedro le dijo:¿Por qué convinisteis en tentar al Espíritu del Señor? He
aquí a la puerta los pies de los que han sepultado a tu marido, y te sacarán a ti. Al
instante ella cayó a los pies de él y expiró. Cuando entraron los jóvenes, la hallaron
muerta; la sacaron y la sepultaron junto a su marido. Hechos 5:3-10)
Con esto te quiero hacer ver, en este testimonio, como vuelvo a repetirte, que yo tenía una
vida cristiana evangélica usada por Dios, pero también había vanagloria en este
corazón,. Quiero decirte en esta hora, quiero hacerte un llamado especial, usted
que esta escuchando o leyendo este testimonio, quiero hacerle un llamado muy especial para que
usted atienda esta palabra. Pero atiénda esta palabra de verdad y escúche bien este llamado al arrepentimiénto, es un llamado a reconocer tus faltas, es un llamado a que si has estado viviendo una vida cristiana evangélica no agradable a Dios, hoy puedas renovarte con Él.
Si tu no has aceptado a Jesucristo y a esta hora quieres aceptarle como Salvador, puedes repetir esta oración de fe conmigo diciéndole:
"Señor Jesús, a esta hora, estoy delante de tu presencia para pedirte perdón por mis
faltas y por mis pecados, hoy me arrepiénto Señor de los males que he hecho y te
suplíco que entres a mi corazón, hoy te acepto como único y suficiente Salvador de mi
vida".
Tú que andas descarriado, tú que estás mal en la iglesia, si escuchas este testimonio,
ahí donde estés inclina tu rostro delante de la presencia de Dios y dile:
"Señor Jesús, ten misericordia de mí, hoy vengo para suplicarte perdón, para
reconciliarme contigo, inscríbeme en el Libro de la Vida y séllame con tu Espíritu
Santo".
AMEN.